La carta del despecho (Hombre)

Ella fijo no sabia lo que yo la quería,
pudo ser que no sabia como decirlo,
pero tengo todas las ideas en mi cabeza
pero no las podía juntar, para poder
decirte todo lo que pensaba, perdón
así soy, es algo que me frustra, y 
me decepciona de mi, ya que por eso,
¡por esa estupidez, ahora te pierdo!
Ahora no tengo con que soñar.
Mínimo me debes de odiar, y se 
debe de preguntar: ¿por qué no hace
nada por mi?¿Acaso no me quiere?
... el orgullo de ser un hombre es
lo que no me deja pelear por ti,
y si supieras lo que te quiero,
pero por cosas que quiero olvidar
como ese orgullo estúpido de hombre,
¡por esa estupidez, ahora te pierdo!
Pero siempre estuve ahí, siempre 
estuve para escuchar, aunque no 
opinara, escuchaba, era feliz a tu lado,
así, tu entre mis brazos, con tu cabeza
en mi pecho, y tu abriéndome tu corazón.
Tal vez el no opinar te enojo.
¿Por esa estupidez, ahora te pierdo?
Bien dicen que uno no sabe lo que tiene
hasta que lo pierde, pero no te he perdido
porque aun sigues aquí, en mi, y voy a luchar
me va a valer madre ese orgullo, porque
¡por esa estupidez, no te voy a perder!